21 de mayo de 2007

Postrailer: Los mejores momentos de Hulka nº 3


Inauguramos nueva sección en el blog paquidérmico, una sección bautizada como POSTRAILER y destinada a repasar (de ahí lo de post) los mejores momentos (de ahí lo de trailer) de un cómic concreto. Además, je, ¿no suena postrailer un poco como a postre, aquello que te deja un regusto agradable al final de la comida?

Sirvan, pues, de primer postrailer los manjares ofrecidos por Dan Slott en el tomo tercero de Hulka editado por Panini (haz click para ampliar y leer mejor):

El tono general de humor en esta serie no impide a Slott lanzar una crítica sobre el estado actual de la industria del cómic norteamericana, totalmente condicionada por las reediciones en tomo. Para ello se sirve de un de sus recursos habituales, la sala de documentación (léase, de colecciones Marvel) del bufete de abogados de Hulka.


No obstante, Slott es consciente de que colecciones minoritarias como su Hulka sobreviven en el mercado gracias a los susodichos tomos, y nos lo resalta más adelante así:

Mr Slott, muy respetuoso con la continuidad Marvel, aprovecha de nuevo la sala de documentación para encajar en el pasado del personaje la clásica colección que le dedicó John Byrne, aquella en la que Hulka atravesaba las viñetas para dirigirse directamente al lector.

Por su parte, el excelente Juan Bobillo contribuye a crear uno de los mejores momentos del cómic cuando Jennifer quiere pasar un mensaje de aviso al difunto Ojo de Halcón. El vengador ha sido convocado desde el pasado como testigo en un juicio de viajes temporales y la abogada verdosa tratará en varias ocasiones de prevenirle sobre su próximo deceso.

Esta trama llevará a Hulka a ser juzgada fuera de la corriente temporal. Uno de los testigos, su primo Bruce Banner, Hulk, ofrece uno de los momentos más emotivos de esta historia y muy coherente con ambos personajes.

Hulka regresa de su juicio acompañada por Dos Pistolas Kid y ambos requieren un breve periodo de adaptación a la corriente temporal normal, lo cual es narrado con maestría por Bobillo en esta tronchante secuencia.




Y con esta divertida escena doy por terminado este primer postrailer. Hay muchos más momentos dignos de esta sección en este tomo de Hulka, como todos aquellos protagonizados por Asombroso Andy y su pizarra, pero serían difícil de resumir en pocas imágenes y no quiero extenderme más para esta primera ocasión.


Esperando que les haya gustado, reciban mis trompacicos...